jueves, noviembre 09, 2006

4º ESO. LA MANIPULACIÓN GENÉTICA - CLONACIÓN

A continuación os pongo los comentarios de la película Gattaca y las preguntas que se os entregó en clase. Después hay un comentario sobre la clonación y la manipulación genética. Os pueden servir de punto de partida para elaborar vuestro propio comentario en vuestros respectivos blogs. Os recuerdo que teneis que añadir vuestros comentarios en el apartado de añadir "comentarios" de esta entrada.

Mucha suerte

GATTACA
"No hay gen para el espíritu humano”

Comentario
Gattaca es una película pequeña, sin efectos especiales, pero con un guión muy inteligente que obliga al espectador a reflexionar acerca de muchos temas presentes desde un argumento ambientado en el futuro: ¿la manipulación genética es la solución a todos los problemas? ¿Esta manipulación conllevará un nuevo tipo de discriminación? ¿La voluntad humana, el espÌritu de superación, los sueños... están en los genes? ¿La perfección puede ser una trampa?
Todas estas cuestiones se plantean en la película, que podría parecer intelectual y pretenciosa pero que no lo es en absoluto, ya que la trama se inscribe dentro de un thriller en torno a un asesinato, y el espectador se ve inmerso en el esfuerzo de Vincent (interpretado por un excelente Ethan Hawke, al que se recordará de películas como El club de los poetas muertos o ¡Viven!), un no válido que se hace pasar por un válido mientras esquiva la investigación del crimen que amenaza con descubrirle y que terminará por desvelar más de una sorpresa, sin olvidar la historia de amor del protagonista con la siempre espléndida Uma Thurman, todo ello envuelto en una banda sonora llena de sugerencias de Michael Nyman (el autor de El Piano). Cabe destacar la magistral labor interpretativa de Jude Law (nominado en los Oscar 1999 a mejor actor secundario por El talento de Mr. Ripley).
Rafael León Rodríguez. La Insignia. España, febrero del 2004.
Ha saltado la gran noticia: ya puede que la humanidad tenga acceso a la piedra filosofal capaz de terminar con todas las calamidades y llevarla a habitar en un futuro no muy lejano un mundo feliz. Puede que unos científicos surcoreanos estén ya en disposición de acometer con garantías la clonación humana. Pero, ¿llevarán los avances biotecnológicos y las técnicas de clonación y selección genética a un futuro mejor para los seres humanos? ¿A esa tierra tantas veces prometida y permanentemente hurtada?
En Gattaca, película de Andrew Niccol, se nos muestra una sociedad donde estas tecnologías están plenamente dominadas y permiten la "fabricación" de seres humanos a la carta. Un mundo sin enfermedad, sin fealdad, ¿sin tristeza? Pero este mundo perfecto y feliz con seres física y mentalmente inmaculados sólo está reservado a unos cuantos. Pues también existe otro submundo, que sólo conocemos tangencialmente a través de la personalidad de Vincent Freeman (¿hombre libre?), el protagonista de la historia, perteneciente a la categoría de los no-válidos, personas inferiores concebidas usando el gratificante modo clásico y no mediante el diseño genético. Personas a las cuales, la aplicación de las mismas técnicas creadoras de seres perfectos permiten diagnosticarles de antemano y con precisión milimétrica todas las miserias que sufrirán en el futuro como producto de sus imperfecciones. Y a causa de esas imperfecciones científicamente detectadas se convierten en ciudadanos de segunda a los que les está vedado el acceso a los privilegios reservados a la élite genética, representada en la persona de Jerome Eugene (el bien nacido).
Las arcaicas discriminaciones movidas por impulsos emocionales de corte racial o religioso han sido superadas por una discriminación "científica" basada en características genéticas no heredadas sino adquiridas en un laboratorio: el eugenismo o genoísmo. Aunque en el fondo la verdadera raíz de la discriminación continúa hundiéndose en los mismos terrenos de siempre: factores de corte clasista por los que los poderosos y ricos ejercen su dominio y sobre los pobres y débiles. En Gattaca sólo los ricos tienen posibilidades de seleccionar las características genéticas de sus hijos.
Pero, partiendo de un contexto estructural dominado por un neoliberalismo salvaje, asentado en la desigualdad y la discriminación y en un predominio perverso de los intereses macroeconómicos privados frente a los beneficios sociales o públicos ¿es Gattaca el destino lógico al que nos pueden llevar la clonación y la selección genética? O, por el contrario, ¿es un producto más o menos afortunado de una ciencia-ficción sin sentido?
La respuesta parece evidente. Estamos más cerca de Gattaca de lo que podríamos pensar. La utilización y destino de la ciencia y sus avances se sitúa hoy día, salvo honrosas excepciones, fuera de los circuitos de la ética. El neoliberalismo, un sistema que no podría subsistir sin apropiarse de todo aquello que en justicia debería ser patrimonio de la humanidad, se apropia permanentemente también de la ciencia para sus espurios, aberrantes y asquerosos fines. La ciencia es hoy día, sin que por ello se pueda o se deba culpabilizar a los científicos, una mercancía privatizada al servicio de una reducida élite dominante en función de su ostentación del poder y acaparación criminal de la riqueza. Por ello, los enormes beneficios que podría y debería proporcionarnos la investigación genética en cuanto a prevención y erradicación de enfermedades y a dotarnos de una mayor calidad de vida, pueden resultar ficticios, falsos y contraproducentes para el conjunto de los seres humanos.
En Gattaca tal vez más importante que lo que se ve, es lo que no se ve, lo que deberíamos intentar intuir. ¿Cómo es ese submundo de los no-válidos? del que sólo tenemos una remota referencia por Vincent, versión futurista de arriesgado ocupante de patera rumbo a las costas gaditanas en busca de un mundo más perfecto y con mas oportunidades. O a la profundidad del mar.
Una vez que los poderosos de Gattaca disponen de una genética perfecta que los hace inmunes ante la enfermedad y tal vez también ante factores ambientales de riesgo, ¿se ocupa su ciencia al servicio de la élite genética de investigar y desarrollar también métodos para curar las enfermedades de los no-válidos? ¿Actúa para prevenir y mitigar los problemas ambientales que los afectan? (Las playas plagadas de algas que aparecen en el mar donde se baña Vincent son síntoma de un exceso de dióxido de carbono).
Tal vez. Pero para ello, en ese futuro posible o imposible deberían haber cambiado mucho las superestructuras, los valores, para que no suceda como en la actualidad, donde una ciencia controlada y atrapada en la maraña del abuso capitalista es incapaz de dedicarse con contundencia a ofrecer soluciones a enfermedades que, como la malaria, afectan a millones de seres humanos. Deberían cambiar también para que muchos avances científicos, como los existentes para el tratamiento del sida, no sean vedados a millones de pobres-enfermos-pobres por la avaricia de criminales mafias farmacéuticas.
Hoy, cada vez que en torno al tema de la selección genética, surgen las voces de alarmistas ávidos de regresar a las cavernas, como el que aquí mal escribe, se echa mano de la ética como maravilloso bálsamo de fierabrás. Pero ¿cómo es posible usar el argumento de la ética científica en un mundo donde la ética se ha convertido en una rara avis en peligro grave de extinción? Una ética que no tiene cabida entre los contra-valores del neoliberalismo. En un momento de Gattaca se dice: "no hay gen para el espíritu humano". Igual que no hay espacio para la ética en el neoliberalismo.
La investigación genética es una gran oportunidad. Pero para que lo sea para todos es preciso que la sociedad sea capaz de arrebatar la ciencia y la vida misma de las zarpas monstruosas del liberalismo. De lo contrario acabaremos en Gattaca y en su contra-Gattaca, como expresión de una sociedad que, a pesar de su apariencia feliz y pulcra, estará asentada en el fascismo de cara más o menos amable, una dictadura clasista-genética disfrazada de democracia ficticia, una discriminación bestial enmascarada por una falsa igualdad, y una libertad aplastada por el determinismo genético.
"Sólo el fuerte consigue el éxito" se dice también en el filme. Frase que podría ponerse en boca actualmente de cualquier explotador neoliberal imbuido de darwinismo social. La investigación genética ofrece grandes posibilidades. Pero de su combinación con el neoliberalismo surge una mezcla demasiado inestable, explosiva y con un potencial destructivo que sólo mínimamente se nos anticipa en películas como Gattaca.



CUESTIONES:

- Valoración general de la película.
- Realiza un comentario sobre los dos artículos propuestos en la ficha.
- ¿Estás de acuerdo con los dos comentarios? ¿por qué?
- ¿Qué destacarías de la película en relación con la manipulación genética?
- Escribe un comentario recogiendo tus impresiones personales en el blog



La clonación, la ciencia y la ética
por Fernando Pascual
La sociedad tiene que promover, también en el mundo de la investigación y la ciencia, valores y principios fundamentales. Los derechos humanos valen para todo hombre. El respeto de esos derechos ha de ser exigido a toda persona capaz de actuar de modo responsable y libre, también al científico.
Las Naciones Unidas no han sido capaces de alcanzar un acuerdo acerca de la prohibición de la clonación humana. En la votación del 6 de noviembre de 2003 se decidió, con 80 votos a favor, 79 en contra y 15 abstenciones, posponer el debate por dos años.
¿Por qué se ha llegado a esta situación? Se trata de un enfrentamiento de puntos de vista. Por un lado, un amplio grupo de países apoyaban la propuesta de Costa Rica, en la que se prohibía tanto la clonación reproductiva como la así llamada “clonación terapéutica”. Por otro, Bélgica y un grupo minoritario de países, defendían prohibir sólo la clonación reproductiva y, al mismo tiempo, dejar libertad a las naciones para legislar sobre la “clonación terapéutica”. Un tercer grupo de países, encabezados por Irán, propusieron posponer la discusión hasta dentro de dos años. Esta propuesta fue la que finalmente, con un mínimo margen de votos, fue aceptada.
Detrás todas estas discusiones se esconde un problema más profundo. Hay que defender, por una lado, la libertad de la investigación, ese margen de acción necesario para que los científicos puedan trabajar, sobre todo cuando buscan caminos para promover el bien de otros seres humanos. Por otro, hay que reconocer esa legítima intervención de la sociedad para poner límites éticos que den garantías de respeto y de seguridad para toda la humanidad, también por lo que se refiere a la investigación científica.
La ciencia busca conocer. Para ello, usa aquellos procedimientos más eficaces, lleva a cabo aquellos experimentos que permitan mejores resultados. Pero no hay que ser un Platón para reconocer que no todo lo que funciona, no todo experimento, es ético. Muchas veces los hombres han buscado ser eficaces a través de la violencia, del robo, del crimen organizado u ocasional. El caso de los médicos que colaboraron con el nacismo y realizaron experimentos de una crueldad inimaginable no es un algo aislado. Ha habido, y hay, científicos (esperamos que pocos) que engañan, que roban secretos a compañeros, que abusan de enfermos para hacer experimentos inhumanos, que sueñan sólo en el dinero y la fama, que se someten a los proyectos de gobernantes sin escrúpulos para descubrir nuevas armas de destrucción masiva o sistemas para esterilizar a grupos sociales o raciales considerados “inferiores”, que practican el aborto como si fuese lo más natural del mundo.
Encontrarnos ante estos científicos no debe ser motivo de escándalo. Hombres deshonestos los hay en casi todos los grupos sociales, y la clase de los investigadores no está inmune de las debilidades humanas. El hecho de que una persona tenga muchos títulos universitarios, haya recibido premios o reconocimientos nacionales o internacionales por algún descubrimiento o, incluso, haya promovido actividades filantrópicas, no garantiza el que un día realice un experimento claramente injusto, o se decida a vender un secreto de laboratorio a una empresa de armamento o a un dictador sin escrúpulos.
Por ello, la sociedad tiene que promover, también en el mundo de la investigación y la ciencia, valores y principios fundamentales. Los derechos humanos valen para todo hombre. El respeto de esos derechos ha de ser exigido a toda persona capaz de actuar de modo responsable y libre, también al científico.
Aquí encuentra su sentido la discusión sobre temas como la clonación, el aborto, la eutanasia y otras posibilidades técnicas que la medicina moderna tiene ante sus ojos.
Haber prohibido toda forma de clonación hubiese significado promover una cultura de respeto al hombre, a cada hombre. No sólo al individuo que pueda ser resultado de una clonación, sino, de modo especial, al científico y al personal que trabaja en un laboratorio, para que no se degraden con un acto injusto, contrario a los principios éticos.
Aquí conviene aclarar una cosa que ha pasado desapercibida a algunos medios de comunicación social. La así llamada “clonación terapéutica” es también clonación reproductiva, en el sentido de que produce (“reproduce”) un individuo humano que tiene un material genético casi totalmente idéntico (al menos en el núcleo) a otro individuo ya existente. ¿Cuál es, entonces, la diferencia entre estos dos “tipos” de clonación? Mientras la clonación reproductiva dejaría nacer al individuo clonado, la así llamada “clonación terapéutica” lo habría fabricado para experimentar con él y luego destruirlo, lo cual es un acto que atenta gravemente contra el respeto debido a todo individuo humano, incluso al que es “producido” por clonación. En otras palabras, es mucho más grave la “clonación terapéutica” que la reproductiva, y el hecho de que algunos países y científicos defiendan la “terapéutica” no puede sino ser motivo de condena y de rechazo por parte de quienes defienden los derechos humanos.
Conviene aclarar, por último, que no habría bastado con prohibir cualquier forma de clonación. Los científicos gozan de una gran libertad de acción en sus laboratorios, libertad que les permite realizar numerosos actos que no acabamos de comprender bien los que no poseemos toda la ciencia que ellos han conquistado a través del estudio. Pero esa libertad implica una mayor responsabilidad. A más margen de acción, mayor urgencia por comprender la importancia del respeto a cada ser humano.
Cuando un laboratorio de reproducción artificial tiene en sus manos los óvulos de varias mujeres, los espermatozoos de varios hombres, y otros tejidos de adultos, fetos o embriones, de hombres y de animales, sabe muy bien que puede hacer, a escondidas, experimentos ilegales. Puede clonar, puede crear embriones para investigación, puede hacer híbridos entre hombres y animales. Los estados, ciertamente, deberán promover sistemas de control, pero lo principal está en la formación ética del científico.
La ciencia ofrece a la humanidad un número creciente de descubrimientos. Cada nueva frontera conquistada abre nuevas posibilidades. Orientar bien todo este cúmulo de saberes depende de la ética. No basta con enseñar en la universidad lo que es posible hacer, sino lo que es correcto. El respeto al hombre, a cada hombre, desde que inicia su existencia como cigoto hasta que muere, debe ser el criterio de discernimiento fundamental para juzgar las acciones de los científicos. Fuera de ese respeto podrán darse descubrimientos importantes, pero será mucho más lo que se pierda. No vale la pena vivir en un mundo técnicamente perfecto y éticamente inhumano.

39 comentarios:

Anónimo dijo...

OSHO


Rajneesh Chandra Mohan Jain (1931 - 1990) filósofo y místico hindú. Criticó todas las tradiciones religiosas, sociales y políticas. Insistió en que todo individuo debe experimentar la verdad por sí mismo, en vez de acumular conocimientos y creencias dadas por otros.

Fue sólo un personaje controvertido y molesto, con ideas peligrosas para la juventud, que apuntaban a destruir las bases de la sociedad. La prensa le juzgó llamándolo “gurú del sexo” y “santón de los ricos”.

Las creencias básicas de Osho están centradas en la tradiciones hindúes y budistas:
Explicó que todas las religiones son una en su origen y que "las diferencias entre ellas son básicamente accidentes de tiempo y lugar y cultura.Osho invitó a sus seguidores a que no se preocuparan por entenderlo sino que se preocuparan por entenderse a si mismos.

http://es.wikipedia.org/wiki/Osho#column-one


A la edad de ventiún años, el 21 de marzo de 1953, Osho alcanzó la iluminación.No pertenece a ninguna tradición: "Soy el comienzo de una conciencia totalmente nueva", ha dicho. "Por favor, no me conectes con el pasado, ni siquiera vale la pena recordarlo".

Osho dejó su cuerpo el 19 de enero de 1990. Justo unas semanas antes se le preguntó qué pasaría cuando se fuera. El respondió: "Mi confianza en la existencia es absoluta. Si existe algo de verdad en lo que digo, sobrevivirá... La gente que se mantenga interesada en mi trabajo, simplemente estará llevando la antorcha, pero sin imponer nada a nadie...


http://www.satyam.com.ar/osho/acercade.htm


OPINION PERSONAL:

creemos que a osho solo le interesaba la felicidad y libertad sin atenerse a unas leyes. Se creia un dios y creo una religion.
en definitiva no estamos de acuerdo con las sectas porque lo que vive la gente en ellas es algo sin control.

Beatriz carrasco

Adrian Castillo
1º bachillerato

Anónimo dijo...

A nosotros la película nos parece interesante, ya que da mucho de pensar.
Porque pensamos que ese futuro no tan lejano al final llegará y cambiara completamente la vida de los humanos.En esta vida se discriminarian a muchas personas(no válidos), y las personas no tendrian ninguna naturaleza, ya que las personas se podrian pedir como quisieran sus padres, o como el que hoy en día compra un coche y elige sus características.
Las enfermedades de los no-validos no tendrian importancia para los demás y no se les buscaría solución.
Las personas deben nacer cada una con sus características, y ojala nunca llegue un futuro así.
Manolo y Samuel
4ºa

Anónimo dijo...

Como muchos puntos de vista, nosotras damos el nuestro.

Quizás la ciencia acabe haciendo lo que quiera, o la gente acabe aceptando todo tipo de clonación.

Pensamos que la clonación terapéutica dentro de lo que cabe puede ser muy beneficiosa para toda aquella persona que tenga una enfermedad asta el día de hoy incurable.

Pero de la clonación de un ser humano o la modificación de los genes de una persona como en la película de GATACA, lo vemos como algo poco ético.Eso de dividir a las personas por válidos o no válidos no sería algo muy moral y estamos completamente seguras que si se llegaran a modificar en la vida real como en la película los genes de un ser humano para hacerlo perfecto, la sociedad en la que vivimos se encargaría de poner etiquetas a las personas.

Por lo tanto una clonación terapéutica podria mejorar nuestra calidad de vida, pero una clonación de una persona o la modificación de genes aría que el mundo se dividiese en dos partes.

Rosa y Miriam

Anónimo dijo...

MIGUE 4ºA
LA CLONACION

El hombre contemporáneo vive marcado por la velocidad con que suceden los cambios y transformaciones en todos los campos de la vida social. El fenómeno es especialmente sorprendente en el ámbito del desarrollo científico y tecnológico, donde la velocidad con que suceden la generación y aplicación de nuevos conocimientos supera no sólo nuestra capacidad de comprensión, sino incluso nuestra capacidad de asombro. Los descubrimientos y desarrollos que realiza el hombre tienen en principio la finalidad de hacer la vida mejor y más fácil a los seres humanos, de proporcionarles más y mejores bienes en todos los aspectos; sin embargo, muchos son los ejemplos donde el desarrollo científico se ha revertido en perjuicio de la humanidad.

En este vertiginoso e impactante desarrollo científico se destaca la genética, que ha dado frutos positivos a la humanidad, pero que también fue utilizada en contra del Ser Humano, desconociendo todo principio ético.

migue angel lopez torres 4ºa

Anónimo dijo...

migue º4a
yo pienso de la pelicula:

k esta bien y entretenia lo k mas me llamo la atencion es lo de la mujer k le hacia falta un riñon por k el suyo estaba mal y del suyo podria sacar una clonacion del riñon.
si la clonacion del ser humano se lleguase hacer seria buena para los seres humanos para curar enfermedades ect...Aunque si clonaran a una persona seria exactamente igual por fuera pero por dentro no seria lo mismo

migue angel 4ºb

Anónimo dijo...

La colonación a mi me parece bien aunque algunos dicen que es ilegal.Me parece bien porque abla de temas muy interesantes e importantes.Experimenta los ovulos de la mujer y los espermatozoides del hombre de distintas razas,fecundan.Si siguen asin podran salvar a la humanidad de muchas enfermedades

mariluz y vanesa 4ºA

Anónimo dijo...

1. ¿Qué es la clonación?[1]

Hay que diferenciar el uso de la palabra clonación en distintos contextos de la biología:
bullet

Si nos referimos al ámbito de la Ingeniería Genética, clonar es aislar y multiplicar en tubo de ensayo un determinado gen o, en general, un trozo de ADN. Sin embargo, Dolly no es producto de Ingeniería Genética.
bullet

En el contexto a que nos referimos, clonar significa obtener uno o varios individuos a partir de una célula somática o de un núcleo de otro individuo, de modo que los individuos clonados son idénticos o casi idénticos al original.

En los animales superiores, la única forma de reproducción es la sexual, por la que dos células germinales o gametos (óvulo y espermatozoide) se unen, formando un zigoto (o huevo), que se desarrollará hasta dar el individuo adulto. La reproducción sexual fue un invento evolutivo (del que quedaron excluidas las bacterias y muchos organismos unicelulares), que garantiza que en cada generación de una especie van a aparecer nuevas combinaciones de genes en la descendencia, que posteriormente será sometida a la dura prueba de la selección y otros mecanismos evolutivos. Las células de un animal proceden en última instancia de la división repetida y diferenciación del zigoto.

Las células somáticas, que constituyen los tejidos del animal adulto, han recorrido un largo camino "sin retorno", de modo que, a diferencia de las células de las primeras fases del embrión, han perdido la capacidad de generar nuevos individuos y cada tipo se ha especializado en una función distinta (a pesar de que, salvo excepciones, contienen el mismo material genético).

El primer experimento de clonación en vertebrados fue el de Briggs y King (1952), en ranas. En los años 70, Gurdon logró colecciones de sapos de espuelas (Xenopus laevis) idénticos a base de insertar núcleos de células de fases larvarias tempranas en ovocitos (óvulos) a los que se había despojado de sus correspondientes núcleos. Pero el experimento fracasa si se usan como donadoras células de ranas adultas.

Desde hace unos años se vienen obteniendo mamíferos clónicos, pero sólo a partir de células embrionarias muy tempranas, debido a que aún no han entrado en diferenciación (y por lo tanto poseen la propiedad de pluripotencia). No es extraño pues el revuelo científico cuando el equipo de Ian Wilmut, del Instituto Roslin de Edimburgo comunicó que habían logrado una oveja por clonación a partir de una célula diferenciada de un adulto.[2] Esencialmente el método (que aún presenta una alta tasa de fracasos) consiste en obtener un óvulo de oveja, eliminarle su núcleo, sustituirlo por un núcleo de célula de oveja adulta (en este caso, de las mamas), e implantarlo en una tercera oveja que sirve como “madre de alquiler” para llevar el embarazo. Así pues, Dolly carece de padre y es el producto de tres "madres": la donadora del óvulo contribuye con el citoplasma (que contiene, además mitocondrias que llevan un poco de material genético), la donadora del núcleo (que es la que aporta la inmensa mayoría del ADN), y la que parió, que genéticamente no aporta nada.[3]

Científicamente se trata de un logro muy interesante, ya que demuestra que, al menos bajo determinadas circunstancias es posible "reprogramar" el material genético nuclear de una célula diferenciada (algo así como volver a poner a cero su reloj, de modo que se comporta como el de un zigoto). De este modo, este núcleo comienza a "dialogar" adecuadamente con el citoplasma del óvulo y desencadena todo el complejo proceso del desarrollo intrauterino.
ventura madrid.

9:55 AM

Anónimo dijo...

10:12 AM
Anónimo dijo...

EL ENGAÑO DEL “BEBE MEDICAMENTO”

Es muy, muy injusto crear falsas expectativas a los padres de un gravemente enfermo. Es muy fácil inducir la obligatoriedad de hacer todo lo que puedan, a unos padres que ven sufrir a un hijo con formas graves de leucemias
Hay una Medicina moderna y actual que es verdadero arte médico; busca siempre que el enfermo venza la enfermedad y para ello le ayuda a potenciar los propios recursos, que no son pocos; cuando hace falta le extre algo que está haciendo un daño incorregible. A veces tiene que aportarle un órgano, sangre, o incluso unas células de un donante al que no hace daño. Si el donante es un cadáver se asegura que está muerto y no rehuye el lógico control del órgano competente (el Centro Nacional de Transplantes), al tiempo que fomenta la donación libre, voluntaria y generosa. A la Medicina no le cabe el concepto de un «bebé medicamento».
Con los «bebé probeta» nació un sucedáneo de la Medicina: las Técnicas de Reproducción Humana Asistida El arte médico renunció a curar la esterilidad, a diagnosticarla y poner remedio y por ello pasó a ser un arte técnico que sólo es capaz de sustituir a un hombre y una mujer en la transmisión de la vida. EL éxito no consiste en curar sino en conseguir fecundar los gametos y ponerle a la madre al «bebé probeta» en el útero. En sus inicios se planteó como una solución extrema y temporal, mientras no se sabía curar la esterilidad, que rápidamente se convirtió en un buen negocio. Surgen clínicas (fundamentalmente privadas) que ofrecen a matrimonios y parejas hacerles hijos y a precios razonables. Se empezó la campaña publicitaria apoyada en el dolor de los matrimonios sin hijos, y continuó sin un pudor que respete ese dolor, porque no se respeta ni potencia ni busca una investigación que les cure. La competencia por el cliente mete de lleno la transmisión de la vida humana en la lógica de la producción: elección de condiciones (si es más fácil y cómodo, se hacen unos 10 ó 12 y se guardan congelados los que sobren por si acaso se necesitan más tarde), elección del número de hijos y del momento y de las condiciones de salud; y un control de calidad biológica que elimine a cualquier bebé que porte cualquier tipo de tara. Nace así el «bebé a la carta» y con él el «embrión congelado sobrante». Y si la edad de la madre, o alguna deficiencia genética de uno de los padres, hacen que los gametos de la pareja no sean aptos se les ofrece semen del banco o óvulos de universitarias jóvenes. El bebé a la carta se convierte también en «bebé adulterino». Nace la obligación de darle un hijo a la pareja, al precio que sea. La técnica hace posible todo; no hace falta curar.
Hace poco más de cinco años nace otro «boom»: las células madre van a curar todas las enfermedades degenerativas. Grandes expectativas, colectivos de enfermos en marcha, y empresas biotecnológicas al acecho. Con una competitividad acientífica la opinión pública y la investigación se divide. La Medicina regenerativa centra sus esfuerzos en curar al enfermo con sus propios recursos: sus propias células madre. Y consigue éxitos espectaculares que saltan demasiado poco a los medios de comunicación y con frecuencia bajo sospecha de «a saber qué están haciendo» para que, a pesar de todo, no se mueren los enfermos que tratan. Por otro lado, el sector médico íntimamente asociado a las clínicas de fecundación in vitro, se lanza a bombo y platillo en la dirección propia de su lógica de poder sobre la vida humana y su transmisión: usar los embriones que han almacenado en años para conseguir células madre. Los enfermos (insisten las campañas) se van a curar con las células que les preparemos a partir de las células madre que tienen los embriones de cinco días: tenemos cientos de miles sobrantes en los congeladores. Se trata por tanto de que, ya que no les vamos a permitir que se desarrollen y vivan, que vivan hasta su día cinco y tengan la noble utilidad de convertirse en «embrión medicamento»; se reconoce que «tal vez» nunca puedan servir como tal remedio a enfermedades, pero servirá seguro como material de investigación. Hay que cambiar las leyes para investigar legalmente destruyendo embriones humanos.
Pero los «embriones medicamento» no sirven para curar: tienen tal exceso de potencia vital que sus células son salvajemente descontroladas y en vez de curar producen tumores. La ineficacia para curar no se puede ocultar bajo la campaña de que la causa del retraso son los prejuicios de algunos; y cuando es obvio, y no ocultable por más tiempo, que la donación terapéutica es una trampa sin base científica y no sale bien; y cuando es evidente que la clonación reproductiva es ciencia ficción ... etc., sale el «bebé medicamento» compatible con el hermano enfermo, como un nuevo progreso de la fecundación in vitro. Es muy, muy, injusto crear falsas expectativas a los padres de un hijo gravemente enfermo. Es muy fácil inducir la obligatoriedad de hacer todo lo que puedan, a unos padres que ven sufrir aun hijo con formas graves de leucemias o anemias. Es muy posible que los padres no sepan exactamente lo que piden ni lo que se les está ofreciendo; hasta la jerga de tanto «apellido» de los embriones y los bebés crea eufemismos y confunde. Creo que por duro que resulte es necesario conocer qué significa seleccionar un embrión para que, cuando nazca, sea donante de la sangre de su cordón umbilical o de parte de su médula ósea a un hermano enfermo con quien es inmunológicamente compatible.
¿Qué le supone al hermano del niño enfermo venir al mundo como «bebé medicamento»? No voy a entrar ahora a los graves asuntos humanos de traerlo al mundo «para» succionarle sus tuétanos. Me limito sólo al ensañamiento a que ha de ser sometido en pro de terceros. La posibilidad de seleccionar exige múltiples hermanos y para ello partir de 10 ó 20 óvulos que serán necesariamente más inmaduros y peores que los que la madre produce, con sus consecuencias para el hijo. Cuando sea un embrión de 8 células le arrancaran dos para ver su calidad como potencial donante; si sobrevive arrastrará las posibles consecuencias de ese cierto déficit. Mientras hacen el análisis genético a sus dos células él estará en el laboratorio sin recibir de su madre lo que necesita para arrancar su vida con fuerza; por ello, con mayor probabilidad que los nacidos tras haber sido engendrados en su madre, podrá sufrir raras y graves enfermedades (las que llamamos ligadas a la impronta) que no tienen solución. Y si nace ¿podrá esperar el hermano enfermo a que crezca un poco antes de empezar a sacarle la médula de sus huesos? Si hay garantía de curación con células de un hermano donante compatible lo lógico es buscar donantes en la familia.
Hay que conocer que no hay garantía alguna de eficacia, ni siquiera en conseguir tal hermano compatible. Hay un solo estudio (publicado el 5 de mayo en JAMA volumen 291, página 2079) y es muy poco alentador. De 199 embriones de 13 parejas se seleccionaron 45 y sólo han nacido 5 niños. Pero, sobre todo, lo que no se debe seguir ocultando es que las células de la sangre del cordón umbilical no producen rechazo y tampoco al menos algunas de las células madre de la médula ósea de donante. Una vez más, ¡es preciso exigir a la ciencia médica soluciones para la enfermedad de un hijo, que no traiga a los padres sufrimientos aún mayores! Es un derecho de los enfermos y un deber de la Medicina y de la comunidad científica.



Nacen los dos primeros “bebés medicamento” concebidos en Bélgica
El Hospital Universitario flamenco de Bruselas (VUB) anunció el 18 de mayo el nacimiento de los dos primeros "bebés medicamento" seleccionados conforme a las técnicas de su Centro de Genética Médica. Estos niños son concebidos con el propósito de que sean donantes compatibles para salvar mediante un trasplante de médula a un hermano que sufre una enfermedad inmunitaria.



ACEPRENSA








El primer niño seleccionado de este modo nació en EE.UU. hace cinco años, y desde entonces ha nacido otra decena de bebés de este tipo. En todo el mundo practican esta técnica cinco centros: dos en EE.UU. (Chicago y Detroit), uno en Australia, otro en Roma y el de Bruselas. Los dos bebés anunciados por el VUB son los primeros que nacen en Europa.


Manolo y Samuel
4ºA

Anónimo dijo...

migue 4ºa

BEBES MEDICAMENTO


Hay una Medicina moderna y actual que es verdadero arte médico; busca siempre que el enfermo venza la enfermedad y para ello le ayuda a potenciar los propios recursos, que no son pocos; cuando hace falta le extre algo que está haciendo un daño incorregible. A veces tiene que aportarle un órgano, sangre, o incluso unas células de un donante al que no hace daño. Si el donante es un cadáver se asegura que está muerto y no rehuye el lógico control del órgano competente (el Centro Nacional de Transplantes), al tiempo que fomenta la donación libre, voluntaria y generosa. A la Medicina no le cabe el concepto de un «bebé medicamento».

Con los «bebé probeta» nació un sucedáneo de la Medicina: las Técnicas de Reproducción Humana Asistida El arte médico renunció a curar la esterilidad, a diagnosticarla y poner remedio y por ello pasó a ser un arte técnico que sólo es capaz de sustituir a un hombre y una mujer en la transmisión de la vida. EL éxito no consiste en curar sino en conseguir fecundar los gametos y ponerle a la madre al «bebé probeta» en el útero. En sus inicios se planteó como una solución extrema y temporal, mientras no se sabía curar la esterilidad, que rápidamente se convirtió en un buen negocio. Surgen clínicas (fundamentalmente privadas) que ofrecen a matrimonios y parejas hacerles hijos y a precios razonables. Se empezó la campaña publicitaria apoyada en el dolor de los matrimonios sin hijos, y continuó sin un pudor que respete ese dolor, porque no se respeta ni potencia ni busca una investigación que les cure. La competencia por el cliente mete de lleno la transmisión de la vida humana en la lógica de la producción: elección de condiciones (si es más fácil y cómodo, se hacen unos 10 ó 12 y se guardan congelados los que sobren por si acaso se necesitan más tarde), elección del número de hijos y del momento y de las condiciones de salud; y un control de calidad biológica que elimine a cualquier bebé que porte cualquier tipo de tara. Nace así el «bebé a la carta» y con él el «embrión congelado sobrante». Y si la edad de la madre, o alguna deficiencia genética de uno de los padres, hacen que los gametos de la pareja no sean aptos se les ofrece semen del banco o óvulos de universitarias jóvenes. El bebé a la carta se convierte también en «bebé adulterino». Nace la obligación de darle un hijo a la pareja, al precio que sea. La técnica hace posible todo; no hace falta curar.

Hace poco más de cinco años nace otro «boom»: las células madre van a curar todas las enfermedades degenerativas. Grandes expectativas, colectivos de enfermos en marcha, y empresas biotecnológicas al acecho. Con una competitividad acientífica la opinión pública y la investigación se divide

miguel angel lopez torres 4ºa

Anónimo dijo...

dijo...

La pelicula de gattaca es una pelicula que no tiene efectos especiales pero tiene un guion muy bueno.Trata de un mundo en el que los no validos no tenian los mismos derechos que los validos.Tambien se plantean los problemas de la manipulacion genetica.Los no validos como no tenian derecho a nada no podian viajar a la Luna y un amigo que era valido como el estaba invalido le proporcionava la sangre y todo lo suyo a su amigo no valido para que pudiera cumplir su sueño e ir al viaje de la luna y cuando se fueron el amigo valido que estaba invalido se quemo por cque no queria vivir invalido.
ventura y arturo

Anónimo dijo...

El engaño del "bebé medicamento"

Natalia López Moratalla,
Catedrática de Bioquímica y Biología Molecular
Universidad de Navarra
30 de mayo de 2004 La Estafeta de Navarra
Medicina que no cura Hay una Medicina moderna y actual que es verdadero arte médico; busca siempre que el enfermo venza la enfermedad y para ello le ayuda a potenciar los propios recursos, que no son pocos; cuando hace falta le extrae algo que está haciendo un daño incorregible. A veces tiene que aportarle un órgano, sangre, o incluso unas células de un donante al que no hace daño. Si el donante es un cadáver se asegura que está muerto y no rehuye el lógico control del órgano competente (el Centro Nacional de Transplantes), al tiempo que fomenta la donación libre, voluntaria y generosa. A la Medicina no le cabe el concepto de un "bebé medicamento".
Cuando las cosas empiezan mal ... Con los "bebé probeta" nació un sucedáneo de la Medicina: las Técnicas de Reproducción Humana Asistida. El arte médico renunció a curar la esterilidad, a diagnosticarla y poner remedio y por ello pasó a ser un arte técnico que sólo es capaz de sustituir a un hombre y una mujer en la transmisión de la vida. El éxito no consiste en curar sino en conseguir fecundar los gametos y ponerle a la madre el "bebé probeta" en el útero. En sus inicios se planteó como una solución extrema y temporal, mientras no se sabía curar la esterilidad, que rápidamente se convirtió en un buen negocio. Surgen clínicas (fundamentalmente privadas) que ofrecen a matrimonios y parejas hacerles hijos y a precios razonables. Se empezó la campaña publicitaria apoyada en el dolor de los matrimonios sin hijos, y continuó sin un pudor que respete ese dolor, porque no se respeta ni potencia ni busca una investigación que les cure. La competencia por el cliente mete de lleno la transmisión de la vida humana en la lógica de la producción: elección de condiciones (si es más fácil y cómodo, se hacen unos 10 ó 12 y se guardan congelados los que sobren por si acaso se necesitan más tarde), elección del número de hijos y del momento y de las condiciones de salud; y un control de calidad biológica que elimine a cualquier bebé que porte cualquier tipo de tara. Nace así el "bebé a la carta" y con él el "embrión congelado sobrante". Y si la edad de la madre, o alguna deficiencia genética de uno de los padres, hacen que los gametos de la pareja no sean aptos se les ofrece semen del banco o óvulos de universitarias jóvenes. El bebé a la carta se convierte también en "bebé adulterino". Nace la obligación de darle un hijo a la pareja, al precio que sea. La técnica hace posible todo; no hace falta curar.
ventura y arturo

Anónimo dijo...

Hoy en día, se ve como la ciencia va progresando y junto con ella el deseo del hombre de crecer, alcanzar y superar a Dios. Escuchar esto es triste y hasta a veces confuso, es algo que nos cuesta entender, ¿ Como el hombre,la propia y perfecta creación de Dios quiere crear un mundo nuevo y lleno de seres hechos con sus propias manos? Es que a caso ¿ No somos colaboradores de este Reino Divino?

Analizar esta etapa de la velocidad, de la ciencia, de la tecnología, de lo deslumbrante y de tantas cosas más, nos hacen tener muchos interrogantes, muchas confusiones, dudas y también grandes sorpresas.

Tomar conciencia de este progreso científico es muy importante. Debemos saber que la ciencia y su desarrollo no esta en un futuro lejano, es más, camina a nuestro lado, a veces de la mano y otras con pasos mucho más acelerados. Tenemos que saber que es lo bueno y lo malo que tiene.

Al hablar en el colegio sobre este tema, que surge a partir de la Bioética, pudimos conocer un poquito más de todo aquello que comprende o trata la ciencia. A partir de ese momento decidimos conocer un poco mas sobre el congelamiento de embriones, producto del progreso científico. Un tema muy amplio e importante, que para muchos le es indiferente y si no, un avance más para el mundo científico.

Al no tener mucho conocimiento del congelamiento de embriones, quisimos desarrollarlo, sacarnos las dudas y profundizarlo para poder darlo a conocer y para defendernos en aquellas onversaciones referidas al tema. Y de esta forma contestar nuestro principal interrogante, que es saber cuál es la finalidad de este proceso.

Para alcanzar nuestros objetivos y encontrar una respuesta a nuestra pregunta tuvimos que realizar una investigación bibliográfica muy amplia,ya que empleamos libros, enciclopedias, revistas, periódicos e Internet. De estas fuentes, pudimos obtener mucha información, la cual fuimos resumiendo y relacionando con la actualidad, con la Iglesia, con al Ley, etc. Para que esa relación sea mas completa, realizamos encuestas a treinta hombres y mujeres de distintas edades (20años para arriba)y diferentes ocupaciones.

Fue un trabajo que significo esfuerzo, sacrificio y satisfacción. Y que no finalizó en un punto, sino en el deseo de que todos puedan conocer un poco mas de la ciencia, principalmente del congelamiento de embriones.

Información de: http://www.monografias.com/trabajos14/manipul-genetica/manipul-genetica.shtml

Mi opinión con lo que dice, de que la ciencia va progresando y con ella el deseo del hombre de creerse Dios ,pues estoy totalmente deacuerdo que es muy triste porque los seres humanos tenemos muchos defectos y entre algunos de ellos es que no sabemos muchas veces diferenciar de lo bueno a lo malo y tambien la ambición y esas cosas en territorio de la ciencia no serían de lo mas adecuadas y estoy segura de que con el tema de la clonación de personas serían muy utilizadas

Rosa Romero 4ºA

Anónimo dijo...

CLONACIÓN



Si nos referimos al ámbito de la Ingeniería Genética, clonar es aislar y multiplicar en tubo de ensayo un determinado gen o, en general, un trozo de ADN. Sin embargo, Dolly no es producto de Ingeniería Genética. En el contexto a que nos referimos, clonar significa obtener un individuo a partir de una célula o de un núcleo de otro individuo.Científicamente se trata de un logro muy interesante, ya que demuestra que, al menos bajo determinadas circunstancias es posible "reprogramar" el material genético nuclear de una célula diferenciada (algo así como volver a poner a cero su reloj, de modo que se comporta como el de un zigoto). De este modo, este núcleo comienza a "dialogar" adecuadamente con el citoplasma del óvulo y desencadena todo el complejo proceso del desarrollo intrauterino.
Dolly no es una copia idéntica de la "madre" que donó el núcleo (no se olvide que el óvulo contiene ese pequeño ADN de la mitocondria). Aunque ambas comparten el mismo ADN nuclear, las instrucciones genéticas de Dolly no experimentaron exactamente el mismo tipo y combinación de estímulos que los de su "madre nuclear". Esto se debe a los fenómenos de epigénesis, complejas series de interacciones entre los genes y el entorno, y aquí entendemos por entorno desde los factores presentes en el citoplasma del óvulo, pasando por los procesos de formación del embrión/feto, a su vez sometidos al peculiar ambiente uterino, y alcanzando a la vida extrauterina (estímulos al nacer, periodo de lactancia, relaciones con la madre, interacciones "sociales" con otros individuos de la especie, etc). En resumidas cuentas, el ADN no contiene un programa unívoco de instrucciones, sino que es flexible, y la expresión genética en cada individuo queda matizada por multitud de factores, quedando "abierta" con una finalidad adaptativa clara.
Evidentemente, un individuo clónico (aparte de no ser totalmente idéntico al original, por las razones ya apuntadas) tendría su propia individualidad, y es absurdo hablar en este sentido de "fotocopias humanas" (sobre todo en lo referente al carácter y conducta).
Cada uno de nosotros responde a la pregunta "¿Quién soy yo?" partiendo de un genotipo nuevo (con sus potencialidades desconocidas para todos) y del secreto. Pero el clónico tiene un genotipo ya vivido (no original), y tenderá a creer que sabe demasiado de sus propios límites y posibilidades: este mero conocimiento puede ser profundamente condicionador de su personalidad.

la información nos hemos metido en google y hemos buscado la clonación humana.

Rosa Mª Garcia Madrid 4º eso A
Raquel León Vilchez

Anónimo dijo...

Pensamos que la película es una representación de lo que puede pasar en un futuro ya que la medicina hoy en día esta muy abanzada.
Nuestra opinión es que la película está bien presentada y con un guión claro. Pero aunque el tema sea interesante es un poco raro y dificil de comprender.
lo que no me parece bien esque la pelicula discrimine a los que son diferentes dentro de esa sociedad.

Sandra y Alba 4ºESO A

Anónimo dijo...

Mario Muñoz Martinez y Kilian Molina Capitán:
Esta pelicula presenta un mundo ficticio en el que hay válidos y no válidos, es decir, el ser perfecto y los que no lo son.
Este filme no consta de efectos especiales.
Tiene un guión con unas palabras y diálogos muy complicado de entender.
No nos parece bien que clasifique a la sociedad de esta manera,NADIE ES PERFECTO.

Anónimo dijo...

GATTACA:LA PELICULA
Comentario:
Gattaca es una magnifica pelicula,que muestra las diferencias entre los hombres perfectos e imperfectos,como ocurre con Vincen y Anton.
La pelicula muestra,de distintas maneras la forma de vivir de una persona a otra como ocurre con las diferencias fisicas(como ocurre con estos hermanos).
OPINION PERSONAL:
A nosotros nos a parecido una magnifica pelicula,por que nos a aportado mucha enseñanzas nuevas por ejemplo:"que no somos iguales ni todos tenemos la misma suerte"

Anónimo dijo...

COMENTARIO

Gattaca es una pelicula muy buena sin efectos especiales.
A nosotras nos ha parecido una pelicula muy buena, pero hemos visto injusto que descriminen a los no validos, ya que son personas normales.
Lo que mas nos llamó la atencion fue cuando
investigan la pestaña para averiguar de quien es,otra cosa que nos ha llamado la atencion es cuando el hombre que estaba en la silla de ruedas ayuda al otro, para que se parezca a el y sea valido a cambio de que el otro lo mantuviese.
De la clonacion una cosa que no nos parece bien es que los padres pueden elegir como son sus hijos(color de pelo,color de ojos,personalidad...)

Nuria Palomero y Estefania Puga. 4ºC

Anónimo dijo...

GATTACA:LA PELICULA
Comentario:
Gattaca es una magnifica pelicula,que muestra las diferencias entre los hombres perfectos e imperfectos,como ocurre con Vincen y Anton.
La pelicula muestra,de distintas maneras la forma de vivir de una persona a otra como ocurre con las diferencias fisicas(como ocurre con estos hermanos).
OPINION PERSONAL:
A nosotros nos a parecido una magnifica pelicula,por que nos a aportado mucha enseñanzas nuevas por ejemplo:"que no somos iguales ni todos tenemos la misma suerte"

ELOY CASTELLANO GALVEZ Y JUAN CARLOS LORENTE 4 E.S.O.C" FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO NUEVO"

Anónimo dijo...

La pelicula de gattaca nos ha gustado por que no tiene demasiados efectos especiales.
Lo que nos quiere mostrar esta pelicula es una sociedad en la que hay dos tipos de personas, los validos y los no validos.
Gattaca trata sobre un no válido que se hace pasar por un válido mientras esquiva la investigación del crimen que amenaza con descubrirle y que terminará por desvelar más de una sorpresa...
Esta pelicula nos a gustado aunque la hemos encontrado algo liosa por que algunas escenas no las comprendiamos y tubimos que preguntarle al profesor.
La verdad esque no nos parece bien la sociedad en la que viven por la desigualdad de derechos.
La clonacion nos parece bien para curar algunas enfermendades aunque estan usando a los humanos como muñecos.

Rocio Zuñiga y Maria del mar Romero

4 ESO-C

Anónimo dijo...

Es una pelicula sin efectos especiles,pero con un buen argumento.trata sobre la manipulacion de los genes para que los hijos esten mas perfeccionados(menos riesgo de enfermedades del corazon,del cancer,de la respiracion,de la paralisis,....)en este mundo,se"discriminan"a los niños que no tienen genes manipulados y por lo tanto menos capacidad para triunfar en la vida o en el trabajo.

Por otra parte trata de un niño normal(no manopulado)que persigue su sueño de llegar a triunfar llendo al espacio,a un planeta donde solo iban la gente perfecta.


YASMINA MARTINEZ DE CASTRO Y J.PEDRO MOLINERO CUESTA. 4ºESO C

Anónimo dijo...

Nos a gustado mucho la pelicula gattaca aunque es un poco liosa y da mucho que pensar y hemos tenido que acudir al profesor para aclarar nuestras dudas.Creemos que a los validos solo le interesaba ellos mismos sin pensar en los demas, y que todo el mundo tiene los mismos derechos y no hay nadie mejor que otro.Nos hemos dado cuenta de que con el tiempo y mucho esfuerzo se puede conseguir todo lo que te propongas igual que le pasó al "no valido"que le ganó a su hermano "valido".
La clonacion esta bien para curar enfermedades,pero con el tiempo seriamos una sociedad artificial sin valores morales.
-eva garrido castillo
-cristina garcia huertas
4 eso.c

Anónimo dijo...

Wenas,somos Jose Antonio miñan Ortega y Jose Torres García de 4º E.S.O.-C del instituto I.E.S. Emilio Muñoz.La película esta muy bien hecha aunque no tenga efectos especiales,tiene un guion muy bien hecho,y todo tiene un buen acabado como sus actores.Como todo tiene su buena conclusión.

Anónimo dijo...

La peliculas nos ha gustado mucho ya que era muy interesante. Lo que no nos ha parecido bien es que el hermano "valido" de Vincent, se creia superior a él por sus cualidades "perfectas", tanto fisicas como, supuestamente, de inteligencia. Al final de la pelicula se demuestra que Vincen es capaz de superarse a si mismo. El valor moral que se trata en la pelicula es "elegir a la carta un bebe". ES imposible crear a alguien perfecto, y es una pena que las personas de nacimiento natural sean reemplazadas y discriminadas por los supestamente perfectos. Lo que no se puede elegir es el caracter y por tanto, una persona supestamente inferior a otra, puede superarle con desearlo y proponerselo. Puedes cumplir tus sueños si realmente lo deseas.
ALBA ROMERO Y MARTA LOPEZ 4ºC

Anónimo dijo...

GATTACA
"No hay gen para el espíritu humano”

Comentario
Gattaca es una película pequeña, sin efectos especiales, pero con un guión muy inteligente que obliga al espectador a reflexionar acerca de muchos temas presentes desde un argumento ambientado en el futuro: ¿la manipulación genética es la solución a todos los problemas? ¿Esta manipulación conllevará un nuevo tipo de discriminación? ¿La voluntad humana, el espÌritu de superación, los sueños... están en los genes? ¿La perfección puede ser una trampa?
Todas estas cuestiones se plantean en la película, que podría parecer intelectual y pretenciosa pero que no lo es en absoluto, ya que la trama se inscribe dentro de un thriller en torno a un asesinato, y el espectador se ve inmerso en el esfuerzo de Vincent (interpretado por un excelente Ethan Hawke, al que se recordará de películas como El club de los poetas muertos o ¡Viven!), un no válido que se hace pasar por un válido mientras esquiva la investigación del crimen que amenaza con descubrirle y que terminará por desvelar más de una sorpresa, sin olvidar la historia de amor del protagonista con la siempre espléndida Uma Thurman, todo ello envuelto en una banda sonora llena de sugerencias de Michael Nyman (el autor de El Piano). Cabe destacar la magistral labor interpretativa de Jude Law (nominado en los Oscar 1999 a mejor actor secundario por El talento de Mr. Ripley).
Rafael León Rodríguez. La Insignia. España, febrero del 2004.
Ha saltado la gran noticia: ya puede que la humanidad tenga acceso a la piedra filosofal capaz de terminar con todas las calamidades y llevarla a habitar en un futuro no muy lejano un mundo feliz. Puede que unos científicos surcoreanos estén ya en disposición de acometer con garantías la clonación humana. Pero, ¿llevarán los avances biotecnológicos y las técnicas de clonación y selección genética a un futuro mejor para los seres humanos? ¿A esa tierra tantas veces prometida y permanentemente hurtada?
En Gattaca, película de Andrew Niccol, se nos muestra una sociedad donde estas tecnologías están plenamente dominadas y permiten la "fabricación" de seres humanos a la carta. Un mundo sin enfermedad, sin fealdad, ¿sin tristeza? Pero este mundo perfecto y feliz con seres física y mentalmente inmaculados sólo está reservado a unos cuantos. Pues también existe otro submundo, que sólo conocemos tangencialmente a través de la personalidad de Vincent Freeman (¿hombre libre?), el protagonista de la historia, perteneciente a la categoría de los no-válidos, personas inferiores concebidas usando el gratificante modo clásico y no mediante el diseño genético. Personas a las cuales, la aplicación de las mismas técnicas creadoras de seres perfectos permiten diagnosticarles de antemano y con precisión milimétrica todas las miserias que sufrirán en el futuro como producto de sus imperfecciones. Y a causa de esas imperfecciones científicamente detectadas se convierten en ciudadanos de segunda a los que les está vedado el acceso a los privilegios reservados a la élite genética, representada en la persona de Jerome Eugene (el bien nacido).
Las arcaicas discriminaciones movidas por impulsos emocionales de corte racial o religioso han sido superadas por una discriminación "científica" basada en características genéticas no heredadas sino adquiridas en un laboratorio: el eugenismo o genoísmo. Aunque en el fondo la verdadera raíz de la discriminación continúa hundiéndose en los mismos terrenos de siempre: factores de corte clasista por los que los poderosos y ricos ejercen su dominio y sobre los pobres y débiles. En Gattaca sólo los ricos tienen posibilidades de seleccionar las características genéticas de sus hijos.
Pero, partiendo de un contexto estructural dominado por un neoliberalismo salvaje, asentado en la desigualdad y la discriminación y en un predominio perverso de los intereses macroeconómicos privados frente a los beneficios sociales o públicos ¿es Gattaca el destino lógico al que nos pueden llevar la clonación y la selección genética? O, por el contrario, ¿es un producto más o menos afortunado de una ciencia-ficción sin sentido?
La respuesta parece evidente. Estamos más cerca de Gattaca de lo que podríamos pensar. La utilización y destino de la ciencia y sus avances se sitúa hoy día, salvo honrosas excepciones, fuera de los circuitos de la ética. El neoliberalismo, un sistema que no podría subsistir sin apropiarse de todo aquello que en justicia debería ser patrimonio de la humanidad, se apropia permanentemente también de la ciencia para sus espurios, aberrantes y asquerosos fines. La ciencia es hoy día, sin que por ello se pueda o se deba culpabilizar a los científicos, una mercancía privatizada al servicio de una reducida élite dominante en función de su ostentación del poder y acaparación criminal de la riqueza. Por ello, los enormes beneficios que podría y debería proporcionarnos la investigación genética en cuanto a prevención y erradicación de enfermedades y a dotarnos de una mayor calidad de vida, pueden resultar ficticios, falsos y contraproducentes para el conjunto de los seres humanos.
En Gattaca tal vez más importante que lo que se ve, es lo que no se ve, lo que deberíamos intentar intuir. ¿Cómo es ese submundo de los no-válidos? del que sólo tenemos una remota referencia por Vincent, versión futurista de arriesgado ocupante de patera rumbo a las costas gaditanas en busca de un mundo más perfecto y con mas oportunidades. O a la profundidad del mar.
Una vez que los poderosos de Gattaca disponen de una genética perfecta que los hace inmunes ante la enfermedad y tal vez también ante factores ambientales de riesgo, ¿se ocupa su ciencia al servicio de la élite genética de investigar y desarrollar también métodos para curar las enfermedades de los no-válidos? ¿Actúa para prevenir y mitigar los problemas ambientales que los afectan? (Las playas plagadas de algas que aparecen en el mar donde se baña Vincent son síntoma de un exceso de dióxido de carbono).
Tal vez. Pero para ello, en ese futuro posible o imposible deberían haber cambiado mucho las superestructuras, los valores, para que no suceda como en la actualidad, donde una ciencia controlada y atrapada en la maraña del abuso capitalista es incapaz de dedicarse con contundencia a ofrecer soluciones a enfermedades que, como la malaria, afectan a millones de seres humanos. Deberían cambiar también para que muchos avances científicos, como los existentes para el tratamiento del sida, no sean vedados a millones de pobres-enfermos-pobres por la avaricia de criminales mafias farmacéuticas.
Hoy, cada vez que en torno al tema de la selección genética, surgen las voces de alarmistas ávidos de regresar a las cavernas, como el que aquí mal escribe, se echa mano de la ética como maravilloso bálsamo de fierabrás. Pero ¿cómo es posible usar el argumento de la ética científica en un mundo donde la ética se ha convertido en una rara avis en peligro grave de extinción? Una ética que no tiene cabida entre los contra-valores del neoliberalismo. En un momento de Gattaca se dice: "no hay gen para el espíritu humano". Igual que no hay espacio para la ética en el neoliberalismo.
La investigación genética es una gran oportunidad. Pero para que lo sea para todos es preciso que la sociedad sea capaz de arrebatar la ciencia y la vida misma de las zarpas monstruosas del liberalismo. De lo contrario acabaremos en Gattaca y en su contra-Gattaca, como expresión de una sociedad que, a pesar de su apariencia feliz y pulcra, estará asentada en el fascismo de cara más o menos amable, una dictadura clasista-genética disfrazada de democracia ficticia, una discriminación bestial enmascarada por una falsa igualdad, y una libertad aplastada por el determinismo genético.
"Sólo el fuerte consigue el éxito" se dice también en el filme. Frase que podría ponerse en boca actualmente de cualquier explotador neoliberal imbuido de darwinismo social. La investigación genética ofrece grandes posibilidades. Pero de su combinación con el neoliberalismo surge una mezcla demasiado inestable, explosiva y con un potencial destructivo que sólo mínimamente se nos anticipa en películas como Gattaca."es el comentario original"

Nuestra opinión es:que la manipulación genética es algo realmente asombroso ya que por una partícula minuscula puedes averiguar muchisimas cosas.Respecto a la clonación nuestra opinión es que a veces tener un clon puede tener sus ventajas e inconvenientes ya que puedes tener serios problemas o viceversa.

Ana Alcoba y Miryam Oviedo 4ºC

Anónimo dijo...

Gattaca nos ha parecido una pelicula muy interesante y con un buen argumento, donde sale la gente perfecto (validos) y la gente no perfecta(no validos).En esta pelicula nos muestra que una persona que no es perfecta puede llegar a ser mejor k una persona que es perfecta, que es mas valiente... .En cunclusion nos ha gustado
ROCIO MARTIN Y ANA TAMAYO 4ºC
ADIOSSS PROFEEE!!JAJAJA BSS

Anónimo dijo...

COMENTARIO DE GATTACA
Nuestra opinion sobre gattaca trata sobre una sociedad perfecta donde las personas que tienen enfermedades incurables (llamados no válidos) no tienen el mismo derecho detrabajo ect que las otras personas que son válidas.
El protagonista de esta pelicula que es un no válido y se llama Vicent se hace pasar por un válido para cumplir su sueño que es viajar al espacio, con ayuda de un válido discapacitado.
Al final lo consigue con ayuda de su amigo y tambien de los médicos.
Nuestra conclusión es que nos parece injusto que vivan así las personas no válidas.
Judith medina y elisa ruano 4c

Anónimo dijo...

LOS MOONIES


Esta secta ha tenido una gran variedad de nombres. A menudo las organizaciones de diverso tipo fundadas por la secta toman nombres que contribuyen a desorientar al observador poco atento. En 1971, adoptó la denominación de “Iglesia de la Unificación”, nombre que ha mantenido hasta hoy.
La secta fue fundada por un individuo de origen campesino el que cambió su nombre original de “Yong Myung Moon” (dragón, brillante, luna) por el de “Sun Myung Moon” (sol, brillante, luna).
Después de estudiar en Seúl, se trasladó a Japón para seguir la carrera de ingeniería industrial. Estando ahí, la policía japonesa lo encarceló y torturó, durante la segunda guerra mundial, por haber fundado un movimiento estudiantil cuyo propósito era conseguir la independencia de Corea. En éste, su país de origen, ha estado en la cárcel cuatro veces: en 1947 fue apresado y torturado por sus ideas religiosas, luego de fundar una iglesia de tendencia pentecostal; en 1948, instalado ya en el país el régimen comunista, fue apresado como enemigo de éste, de cuyas manos fue liberado por las fuerzas de las Naciones Unidas en 1950. Posteriormente, en 1955, fue encarcelado por fomentar la promiscuidad sexual, acusación de la cual fue declarado inocente, y finalmente en 1957 fue puesto en prisión por incitar a los jóvenes a rechazar el servicio militar como “objetores de conciencia”.
Habiéndose casado una primera vez, el matrimonio fracasó porque su mujer no comprendió, al parecer, la naturaleza de la misión de Moon. En 1960, a los 48 años, conoció a su actual mujer, Han Hak Ja, entonces 30 años menor que él, con la que contrajo un matrimonio que todavía perdura, del que han nacido 13 hijos.
Según Moon, el hecho decisivo de su vida tuvo lugar cuando tuvo una visión en que vio a Jesús, al tiempo que oía el siguiente mensaje: “Tienes una misión importante que realizar para el cumplimiento de la providencia divina. Jesucristo no pudo revelar todo lo que tenía que decir ni asegurar la salvación”. La doctrina de Moon afirma, en efecto, que Jesús, por haber sido muerto en la cruz, dejó inconclusa su misión, y el mensaje le encarga a él, Moon, completar la obra de la redención. Estando en esta secta, Moon desarrolló la idea de que el verdadero Mesías era él mismo, cosa que lo condujo a la correspondiente proclamación una vez terminada la Segunda Guerra Mundial.
Moon comenzó la expansión de ésta enviando el primer misionero a Japón y él mismo se trasladó a los Estados Unidos de Norteamérica. A mediados de la década de 1990, los seguidores de Moon eran más de dos millones de personas, repartidas en 120 países. La mayor concentración de ellos está en Corea, donde suman alrededor de un millón.
Lo que más preocupa de este Movimiento es que recurre a tácticas de lavado de cerebro, de control mental y de presión para ir convenciendo a sus adeptos. (...) En Norteamérica y Brasil ha habido campañas muy fuertes contra este MovimiHabría que precisar, frente a este concepto, que en el caso específico de la secta Moon, ésta sí pone especial énfasis en la importancia del grupo, sosteniendo que se trata de una sola y gran familia.ento, ya que miles de padres de familia consideran que sus hijos han sido secuestrados y son mantenidos lejos de sus familias por la fuerza. El encuentro del grupo reúne a individuos con una misma información y sometidos a un mismo método de entrenamiento para llegar a obtener la salvación prometida. Y el control sobre sus miembros se ejerce precisamente inculcando unos modos de pensar y aplicando entrenamientos especiales, entre los cuales no están exentos los procesos psicológicos. Habría que precisar, frente a este concepto, que en el caso específico de la secta Moon, ésta sí pone especial énfasis en la importancia del grupo, sosteniendo que se trata de una sola y gran familia.
INMA VALDIVIA Y AFRICA MEDINA.

Anónimo dijo...

El 27 de febrero de 1997 la revista científica Nature publicaba el informe sobre la primera clonación de un mamífero a partir del núcleo de una célula adulta de otro individuo. La "presentación en sociedad" de la oveja Dolly es uno de esos momentos en los que la ciencia espolea una plétora de reacciones emocionales de todo tipo, despertando sueños (o pesadillas) y reavivando mitos y viejos fantasmas.


¿Qué es la clonación?



Si nos referimos al ámbito de la Ingeniería Genética, clonar es aislar y multiplicar en tubo de ensayo un determinado gen o, en general, un trozo de ADN. Sin embargo, Dolly no es producto de Ingeniería Genética. En el contexto a que nos referimos, clonar significa obtener un individuo a partir de una célula o de un núcleo de otro individuo.

En los animales superiores, la única forma de reproducción es la sexual, por la que dos células germinales (óvulo y espermatozoide) se unen, formando un zigoto (o huevo), que se desarrollará hasta dar el individuo adulto. La reproducción sexual fue un invento evolutivo (del que quedaron excluidas las bacterias y muchos organismos unicelulares), que garantiza que en cada generación de una especie van a aparecer nuevas combinaciones de genes en la descendencia, que posteriormente será sometida a la dura prueba de la selección y otros mecanismos evolutivos. Las células de un animal proceden en última instancia de la división repetida y diferenciación del zigoto. Las células somáticas, que constituyen los tejidos del animal adulto, han recorrido un largo camino "sin retorno", de modo que, a diferencia de las células de las primeras fases del embrión, han perdido la capacidad de generar nuevos individuos y cada tipo se ha especializado en una función distinta (a pesar de que, salvo excepciones, contienen el mismo material genético).

En los años 70, Gurdon logró colecciones de ranas idénticas a base de insertar núcleos de células de fases larvarias tempranas en ovocitos (óvulos) a los que se había despojado de sus correspondientes núcleos. Pero el experimento fracasa si se usan como donadoras células de ranas adultas. Desde hace unos años se vienen obteniendo mamíferos clónicos, pero sólo a partir de células embrionarias muy tempranas, debido a que aún no han entrado en diferenciación (a esta propiedad se la suele llamar totipotencia). No es extraño pues el revuelo científico cuando el equipo de Ian Wilmut, del Instituto Roslin de Edimburgo comunicó que habían logrado una oveja por clonación a partir de una célula diferenciada de un adulto. Esencialmente el método (que aún presenta una alta tasa de fracasos) consiste en obtener un óvulo de oveja, eliminarle su núcleo, sustituirlo por un núcleo de célula de oveja adulta (en este caso, de las mamas), e implantarlo en una tercera oveja que sirve como "madre de alquiler" para llevar el embarazo. Así pues, Dolly carece de padre y es el producto de tres "madres": la donadora del óvulo contribuye con el citoplasma (que contiene, además mitocondrias que llevan un poco de material genético), la donadora del núcleo (que es la que aporta la inmensa mayoría del ADN), y la que parió, que genéticamente no aporta nada.

Científicamente se trata de un logro muy interesante, ya que demuestra que, al menos bajo determinadas circunstancias es posible "reprogramar" el material genético nuclear de una célula diferenciada (algo así como volver a poner a cero su reloj, de modo que se comporta como el de un zigoto). De este modo, este núcleo comienza a "dialogar" adecuadamente con el citoplasma del óvulo y desencadena todo el complejo proceso del desarrollo intrauterino.

Dolly no es una copia idéntica de la "madre" que donó el núcleo (no se olvide que el óvulo contiene ese pequeño ADN de la mitocondria). Aunque ambas comparten el mismo ADN nuclear, las instrucciones genéticas de Dolly no experimentaron exactamente el mismo tipo y combinación de estímulos que los de su "madre nuclear". Esto se debe a los fenómenos de epigénesis, complejas series de interacciones entre los genes y el entorno, y aquí entendemos por entorno desde los factores presentes en el citoplasma del óvulo, pasando por los procesos de formación del embrión/feto, a su vez sometidos al peculiar ambiente uterino, y alcanzando a la vida extrauterina (estímulos al nacer, periodo de lactancia, relaciones con la madre, interacciones "sociales" con otros individuos de la especie, etc). En resumidas cuentas, el ADN no contiene un programa unívoco de instrucciones, sino que es flexible, y la expresión genética en cada individuo queda matizada por multitud de factores, quedando "abierta" con una finalidad adaptativa clara


¿Para qué serviría la clonación en animales?


Como suele ocurrir con muchos avances científicos de vanguardia, aquí puede que también se hayan exagerado las posibles derivaciones prácticas inmediatas, aunque no cabe duda que a medio y largo plazo, cuando la técnica se vaya perfeccionando, podría encontrar numerosos campos de aplicación. (Dejamos aparte el ámbito de la biología fundamental, que tendrá que "hincar el diente" en los fascinantes interrogantes básicos abiertos, sobre todo relativos al ciclo celular y al control de la diferenciación).

Como suele ocurrir con muchos avances científicos de vanguardia, aquí puede que también se hayan exagerado las posibles derivaciones prácticas inmediatas, aunque no cabe duda que a medio y largo plazo, cuando la técnica se vaya perfeccionando, podría encontrar numerosos campos de aplicación. (Dejamos aparte el ámbito de la biología fundamental, que tendrá que "hincar el diente" en los fascinantes interrogantes básicos abiertos, sobre todo relativos al ciclo celular y al control de la diferenciación).

Uno de los objetivos buscados por el grupo de Wilmut (en alianza con una empresa) es unir la técnica de la clonación con la de Ingeniería genética de mamíferos con objeto de producir medicamentos o sustancias útiles comercialmente. La idea es que una vez que se haya obtenido un animal transgénico interesante (por ejemplo, ovejas o vacas que en su leche secretan sustancias terapéuticas determinadas por un gen introducido previamente), ese individuo serviría de "molde" para generar varios ejemplares clónicos.


Otra aplicación (más en la línea de la ganadería tradicional) sería asegurar copias de un ejemplar que haya mostrado buenos rendimientos (en carne, en leche, etc.). La clonación evitaría que su buena combinación de genes (su genotipo) se "diluyera" al cruzarlo sexualmente con otro. Sin embargo, mientras el coste de la técnica sea elevado, no estará al alcance de las explotaciones ganaderas convencionales. Pero además habría que tener mucha precaución con la amenaza de pérdida de diversidad genética de la cabaña ganadera, ya que si se impusiera este método, se tendería a la uniformidad (una tendencia ya presente en la agricultura y ganadería actuales). Recordemos que la biodiversidad es un recurso valioso también en los "ecosistemas agropecuarios", ya que supone una reserva de recursos genéticos adaptados a diversas condiciones ambientales y a diversos contextos socioeconómicos.

Se ha hablado igualmente de que la clonación podría representar la salvación "in extremis" de ciertas especies silvestres amenazadas de extinción y difíciles de criar en cautividad. Pero si se llega a este caso, sería el triste reconocimiento de nuestro fracaso de conservarlas por medios más simples y naturales. Además, lo más probable es que, debido a que la clonación no aporta diversidad genética, la especie estuviera abocada de todas formas a la "muerte genética", condenada quizás a vivir en zoológicos o en condiciones altamente artificiales, casi como piezas de un museo viviente.


¿Clonación en humanos?



Como es sabido, cuando una técnica se pone a punto en un animal doméstico o de laboratorio, sólo es cuestión de tiempo y dinero el que pueda ser aplicada a humanos. Esta perspectiva es la que, obviamente, ha despertado esa mezcla de fascinación, ansiedad y temor en la opinión pública. El ciudadano actual percibe los adelantos científicos con cierta ambivalencia: si bien reconoce como positivos el avance del conocimiento y del bienestar, es igualmente consciente de que pueden acarrear problemas ambientales, y amenazar valores y creencias importantes para la cohesión social. El mito de Frankestein no es más que la plasmación simbólica del temor a que nuestras creaciones tecnológicas nos sobrepasen y nos dominen, una idea sistematizada por las recientes aportaciones de la filosofía y sociología de la ciencia y la tecnología.

Desgraciadamente, la mayoría de los medios de comunicación han perdido una nueva oportunidad de demostrar que pueden estar al servicio del debate social y del diálogo sobre bases racionales, primando la difusión de estereotipos trasnochados e ideas peregrinas. Pero por otro lado, algunas revistas científicas siguen empeñadas en querer demostrarnos que la racionalidad tecnocientífica es la forma más excelsa (¿quizá única?) de conocimiento auténtico, y que los otros criterios deberían rendirse a ella.

Lo que se juega en el debate sobre la clonación no es obtener copias de Einstein o de Hitler, (algo imposible, porque en cada individuo influye poderosamente el ambiente y la educación). Olvidémonos de anti-utopías de tipo Un mundo feliz. Tampoco me parece pertinente la postura de los comentaristas de la revista Nature, cuando despachan lo que ellos llaman "vagas aseveraciones sobre la dignidad humana", imputando a sus defensores el caer en ideas sobre determinismo genético. Efectivamente, nuestros genes no determinan nuestra individualidad ni nuestra dignidad como personas. Pero la auténtica oposición a la clonación en humanos no va por esos derroteros.

Evidentemente, un individuo clónico (aparte de no ser totalmente idéntico al original, por las razones ya apuntadas) tendría su propia individualidad, y es absurdo hablar en este sentido de "fotocopias humanas" (sobre todo en lo referente al carácter y conducta). Esto, insisto, no es lo esencial. Según mi opinión, el cogollo de la cuestión ya quedó brillantemente apuntado hace casi 20 años por Hans Jonas, cuando analizó lo que significaría existencialmente ser un clónico para el propio individuo afectado. Independientemente de la influencia real que tengan los genes en la conducta humana (desde luego, no superior a la ambiental y cultural), el clónico se sentiría como individuo diseñado ex-profeso por terceras personas, y su situación, a diferencia de lo que se ha dicho, no es en absoluto equivalente a la de los gemelos idénticos. Mientras los gemelos comparten simultáneamente en el tiempo un mismo genotipo aleatorio totalmente nuevo, del que nadie sabe nada a priori, al clónico se le impone un genotipo ya experimentado anteriormente por otra persona. La clave de la crítica estriba en que esto crearía una situación asimétrica del clónico respecto del original: el clónico tendrá encima la "losa" de saberse fruto de diseño de otras personas, y su autopercepción se resentiría por ello. Todo el proceso de su autodescubrimiento y sus relaciones con los demás quedarán marcados indeleblemente. Una vez más: no se trata de determinismo genético, sino de la intromisión de un conocimiento perturbador en lo más central de lo que constituye la búsqueda que cada individuo hace de su propia personalidad. Cada uno de nosotros responde a la pregunta "¿Quién soy yo?" partiendo de un genotipo nuevo (con sus potencialidades desconocidas para todos) y del secreto. Pero el clónico tiene un genotipo ya vivido (no original), y tenderá a creer que sabe demasiado de sus propios límites y posibilidades: este mero conocimiento puede ser profundamente condicionador de su personalidad. ¿Dónde quedaría la aventura de sentirse único e irse descubriendo a sí mismo? Por estas razones, y al igual a lo que se ha propuesto para los avances en las técnicas de sondeo de propensiones genéticas, la bioética y el bioderecho están articulando y reclamando la proclamación de un "derecho a ser fruto del azar" y de un "derecho a la ignorancia", a no saber (o creer saber) demasiado de uno mismo por adelantado.

Y, por supuesto, paralelamente a estos argumentos, no deja de resonar un viejo principio ético básico de nuestra cultura: los seres humanos son fines en sí mismos, y no pueden ser medios para otros fines, por muy loables que éstos sean (incluyendo el avance científico). ¿Con qué autoridad y con qué sabiduría podríamos imponer a otros seres humanos nuestro diseño en su misma entraña biológica, a carecer de la referencia a un padre y una madre, a ser fruto de una unión sexual? ¿Seríamos capaces de experimentar ("a ver lo que sale") con otros seres humanos so pretexto de eliminar el azar biológico? ¿Quiénes somos nosotros para abrogar este mecanismo de lotería genética que lleva miles de millones de años funcionando, qué criterios usaríamos en su lugar, y quién decidiría? El debate de la clonación (junto con otros avances derivados de la biotecnología) va a ser un buen campo para poner a prueba la capacidad de nuestras sociedades para discutir racional y democráticamente sobre la posibilidad de encauzar la tecnología. ¿Tendremos en nuestras manos la oportunidad de ponerla al servicio de las profundas necesidades de la humanidad, o seguiremos deslizándonos por la pendiente del sonambulismo tecnológico?

barbara e inma 4ºa

Anónimo dijo...

1. ¿Qué es la clonación?[1]

Hay que diferenciar el uso de la palabra clonación en distintos contextos de la biología:
bullet

Si nos referimos al ámbito de la Ingeniería Genética, clonar es aislar y multiplicar en tubo de ensayo un determinado gen o, en general, un trozo de ADN. Sin embargo, Dolly no es producto de Ingeniería Genética.
bullet

En el contexto a que nos referimos, clonar significa obtener uno o varios individuos a partir de una célula somática o de un núcleo de otro individuo, de modo que los individuos clonados son idénticos o casi idénticos al original.

En los animales superiores, la única forma de reproducción es la sexual, por la que dos células germinales o gametos (óvulo y espermatozoide) se unen, formando un zigoto (o huevo), que se desarrollará hasta dar el individuo adulto. La reproducción sexual fue un invento evolutivo (del que quedaron excluidas las bacterias y muchos organismos unicelulares), que garantiza que en cada generación de una especie van a aparecer nuevas combinaciones de genes en la descendencia, que posteriormente será sometida a la dura prueba de la selección y otros mecanismos evolutivos. Las células de un animal proceden en última instancia de la división repetida y diferenciación del zigoto.

Las células somáticas, que constituyen los tejidos del animal adulto, han recorrido un largo camino "sin retorno", de modo que, a diferencia de las células de las primeras fases del embrión, han perdido la capacidad de generar nuevos individuos y cada tipo se ha especializado en una función distinta (a pesar de que, salvo excepciones, contienen el mismo material genético).

El primer experimento de clonación en vertebrados fue el de Briggs y King (1952), en ranas. En los años 70, Gurdon logró colecciones de sapos de espuelas (Xenopus laevis) idénticos a base de insertar núcleos de células de fases larvarias tempranas en ovocitos (óvulos) a los que se había despojado de sus correspondientes núcleos. Pero el experimento fracasa si se usan como donadoras células de ranas adultas.

Desde hace unos años se vienen obteniendo mamíferos clónicos, pero sólo a partir de células embrionarias muy tempranas, debido a que aún no han entrado en diferenciación (y por lo tanto poseen la propiedad de pluripotencia). No es extraño pues el revuelo científico cuando el equipo de Ian Wilmut, del Instituto Roslin de Edimburgo comunicó que habían logrado una oveja por clonación a partir de una célula diferenciada de un adulto.[2] Esencialmente el método (que aún presenta una alta tasa de fracasos) consiste en obtener un óvulo de oveja, eliminarle su núcleo, sustituirlo por un núcleo de célula de oveja adulta (en este caso, de las mamas), e implantarlo en una tercera oveja que sirve como “madre de alquiler” para llevar el embarazo. Así pues, Dolly carece de padre y es el producto de tres "madres": la donadora del óvulo contribuye con el citoplasma (que contiene, además mitocondrias que llevan un poco de material genético), la donadora del núcleo (que es la que aporta la inmensa mayoría del ADN), y la que parió, que genéticamente no aporta nada.[3]

Científicamente se trata de un logro muy interesante, ya que demuestra que, al menos bajo determinadas circunstancias es posible "reprogramar" el material genético nuclear de una célula diferenciada (algo así como volver a poner a cero su reloj, de modo que se comporta como el de un zigoto). De este modo, este núcleo comienza a "dialogar" adecuadamente con el citoplasma del óvulo y desencadena todo el complejo proceso del desarrollo intrauterino.

luis gabriel de4 eso a

Anónimo dijo...

BEBE MEDICAMENTO

La Medicina regenerativa centra sus esfuerzos en curar al enfermo con sus propios recursos: sus propias células madre.Es muy, muy, injusto crear falsas expectativas a los padres de un hijo gravemente enfermo.Pero, sobre todo, lo que no se debe seguir ocultando es que las células de la sangre del cordón umbilical no producen rechazo y tampoco al menos algunas de las células madre de la médula ósea de donante.Es un derecho de los enfermos y un deber de la Medicina y de la comunidad científica.

OPINIÓN PERSONAL: es muy importante cuando estas embarazada o de lactancia tomar medicamentos necesarios porque si no afectaría al bebe.
Esto no a parecido importante porque incumbe a nuestra vida y es necesario saberlo.

MARILUZ Y VANESA 4ºA

Anónimo dijo...

BEBE MEDICAMENTO
Hay una Medicina moderna y actual que es verdadero arte médico; busca siempre que el enfermo venza la enfermedad y para ello le ayuda a potenciar los propios recursos, que no son pocos; cuando hace falta le extrae algo que está haciendo un daño incorregible. A veces tiene que aportarle un órgano, sangre, o incluso unas células de un donante al que no hace daño. Si el donante es un cadáver se asegura que está muerto y no rehuye el lógico control del órgano competente (el Centro Nacional de Transplantes), al tiempo que fomenta la donación libre, voluntaria y generosa. A la Medicina no le cabe el concepto de un "bebé medicamento". Con los "bebé probeta" nació un sucedáneo de la Medicina: las Técnicas de Reproducción Humana Asistida.El bebé a la carta se convierte también en "bebé adulterino". Nace la obligación de darle un hijo a la pareja, al precio que sea. La técnica hace posible todo; no hace falta curar. Hace poco más de cinco años nace otro "boom": las células madre van a curar todas las enfermedades regenerativas. Grandes expectativas, colectivos de enfermos en marcha, y empresas biotecnológicas al acecho. Con una competitividad acientífica la opinión pública y la investigación se divide. La Medicina regenerativa centra sus esfuerzos en curar al enfermo con sus propios recursos: sus propias células madre. Y consigue éxitos espectaculares que saltan demasiado poco a los medios de comunicación y con frecuencia bajo sospecha de "a saber qué están haciendo" para que, a pesar de todo, no se mueren los enfermos que tratan. Por otro lado, el sector médico íntimamente asociado a las clínicas de fecundación in vitro, se lanza a bombo y platillo en la dirección propia de su lógica de poder sobre la vida humana y su transmisión: usar los embriones que han almacenado en años para conseguir células madre. Pero los "embriones medicamento" no sirven para curar: tienen tal exceso de potencia vital que sus células son salvajemente descontroladas y en vez de curar producen tumores.sale el "bebé medicamento" compatible con el hermano enfermo, como un nuevo progreso de la fecundación in vitro. Es muy fácil inducir la obligatoriedad de hacer todo lo que puedan, a unos padres que ven sufrir a un hijo con formas graves de leucemias o anemias. Es muy posible que los padres no sepan exactamente lo que piden ni lo que se les está ofreciendo; hasta la jerga de tanto "apellido" de los embriones y los bebés crea eufemismos y confunde.
En la Medicina no cabe el concepto de un "bebé medicamento". Hay una Medicina moderna y actual que es verdadero arte médico; busca siempre que el enfermo venza la enfermedad y para ello le ayuda a potenciar los propios recursos, que no son pocos; cuando hace falta le extrae algo que está haciendo un daño incorregible.


Raquel León
4º-A
Rosa Mª Garcia
Nuestra opinión es que no deberia de existir el bebe medicamento excepto para ayudar en vez de por capricho.

Anónimo dijo...

GATTACA


Gattaca muestra las diferencias entre los hombres perfectos e imperfectos.
La pelicula muestra,de distintas maneras la forma de vivir de una persona a otra como ocurre con las diferencias fisicas.
Pensamos que lo que pasa en la pelicula puede pasar en un futuro.

Nuestra opinion es que si todo esto pasara en un futuro nos cambiaría la vida mucho a todos.

Raquel Leon 4º-A
Rosa Mª Garcia

Anónimo dijo...

La película de Gattaca trata de la manipulación genética. Esta película se basa en el nacimiento de un niño “no válido” con problemas en su corazón y esto le impedía lograr su sueño, que era hacer un viaje espacial. Más tarde este chico, Vicent; tiene un hermano válido(creado por la manipulación genética,”perfecto”) y continuamente lo estaban comparando con él.
Cuando Vicent se hace mayor sigue con su sueño de la infancia, y termina siendo ayudado por un válido con el problema de estar en silla de ruedas por un “accidente”, llamado Jerome. Este le proporciona a Vicent muestras de orina y de sangre y asi poder hacerse pasar por Jerome y sí poder cumplir su gran sueño haciendo un viaje a una luna de Júpiter. Vicent con esfuerzo para que no descubran su verdadera identidad de no válido, va ascendiendo puestos en su trabajo hasta ser seleccionada para hacer ese viaje. Pero por un fallo suyo (se le cae una pestaña) se ve involucrado en un asesinato de una persona muy importante de la agencia. Por eso comienzan hacer una serie de investigaciones en las que descubren que hay un no valido infiltrad.
Vicent tiene un romance con una compañera de trabajo, esta al pricipio no sabía nada de la verdadera identidad de Vicent y ella lo conoce como Jerome. Esta se acaba enterando y lo ayuda para que no se supiera su verdadera identidad.
Al final vicent le demuestra a su hermano valido que porque no esta modificado genéticamente, no significa que no pueda hacer las mismas cosas que ellos y no valga lo mismo.
Por último Vicent consigue hacer el viaje de sus sueños, pero Jerome decide acabar con su vida ya que se encuentra inútil.

A nosotras nos ha gustado mucho, aunque hay muchas injusticias, porque todos tenemos que tener los mismos derechos y en la película los válidos y los no válidos estan en distinta posición de sociedad. Aunque en un futuro puede ser válido la creación de personas creadas geneticamente.

MIRIAM ARIAS GONZÁLEZ
TAMARA TORRES CARRASCO 4º E.S.O B

Anónimo dijo...

Nos a gustado mucho la pelicula,porque es mu interesante.
La glonacion de personas es emocionante, pero no creemos que por el echo de que puedan ser mejores que nosotros tengan que desvalorar al ser humano no clonado.Durante la pelicula emos visto que lo unico que importaba en ese mundo era ser perfecto, pero al final se demuestra que tambien puede aver sentimientos que superen esa obsesion.El protagonista de la pelicula lo demuestra porque al final consigue su deseo de viajar al espacio y tampoco nos a gustado la forma de ser de su propio hermano.

Calorina Torres 4ºeso B
Sandra Osuna 4ºeso B

Anónimo dijo...

Es una pelicula entretenida todo es sobre ocultar la identidad de dos personas.Uno era perfecto geneticamente pero era minusbalido y el otro no era perfecto pero no estaba minusbalido e intentaron ocultar la identidad del que estaba bien con la del perfecto geneticamente.Nos ha gustado bastante la pelicula. Sergio Diaz Garcia
y Federico Morales Martinez 4ºE.S.O. B

Anónimo dijo...

ARTURO HUERTAS RUIZ y ANGELA VANESA PETRI 4ªESO-B
La pelicula nos ha gustado mucho tambien nos a impresionado mucho porque como quieren copiarse uno al otro y tambien por su genetica se quieren copiar.
Se llama Vincen y el otro Geron ford.
Geron ford era minusvalido y Vincen quiso ayudarle a ser astronauta porque el no podia
nos a gustado mucho.
!FELIZ NAVIDAD¡

Anónimo dijo...

ARTURO HUERTAS RUIZ y ANGELA VANESA PETRI 4ªESO-B
La pelicula nos ha gustado mucho tambien nos a impresionado mucho porque como quieren copiarse uno al otro y tambien por su genetica se quieren copiar.
Se llama Vincen y el otro Geron ford.
Geron ford era minusvalido y Vincen quiso ayudarle a ser astronauta porque el no podia
nos a gustado mucho.
!FELIZ NAVIDAD¡

Anónimo dijo...

julio abreu cruz antonio jesus agea 4ºB
La pelicula me ha gustado bastante por la intriga que tiene lo de el cambio de identidad y las dificultades que tiene Vinccent del corazon lo cual no le impide que logre su sueño siento no ser mas extenso pero es la segunda vez que lo escribo y no me da tiempo y la proxime vez k sea del tiron que se nos olvida la mitad y perdemos el hilo.
un saludo

Anónimo dijo...

Esta pelicula en nuestra opinión está bastante bien, porque su tema principal es uno de los que mayor interes tiene en la actualidad.

Creemos que la clonación siempre que sea para curar enfermedades sin remedio hasta ahora, está bastatnte bien.

La pelicula de "Gattaca" trata de una persona "no perfecta" que se hace pasar por una "perfecta".
Todo iba bien hasta que en Gattaca hay un asesinato por lo que aumenta la seguridad y la identidad del no valido se ve amenazada de que la descubran. La investigación sigue avanzando y en realidad nadie lo descubre excepto una persona y otra al que se lo confiesa. A estas personas no les importa si es valido o no valido en Gattaca sino si valido o invalido como persona. Este consigue sus propositos.

Mónica Leyva García 4ºb
Mercedes Pinel Rios 4ºb